La escuela comunitaria y de ciencias + Centro de agricultura en Yuma, Arizona Western, en Arizona; refleja la identidad audaz de la universidad y su compromiso con los estudiantes y la comunidad local.
La escuela Arizona Western estaba buscando un cambio en términos de identidad de campus, compromiso con la comunidad, y enfoque académico. Con el nuevo centro comunitario escolar (CCC) y el laboratorio de ciencias y agricultura (Sci-Ag), la universidad ha querido resaltar la superposición y la intersección de los programas de ciencia y maximizar el compromiso con la comunidad de Yuma. Los edificios alientan la cooperación y la interacción de los diversos grupos de estudiantes, profesores y residentes de la comunidad.
Este proyecto ofrece una nueva puerta de entrada al campus, marcando múltiples puntos de inflexión (o desviaciones de la norma): integración de la ciencia y la comunidad, un impulso a las iniciativas exitosas de los estudiantes, y un circuito cerrado de objetivos sustentables. El “centro de ciencias y agricultura”, fusiona la instrucción interdisciplinaria de la ciencia, con un campus sustentable y programas comunitarios.
Las estrategias sustentables utilizadas en el edificio se convierten en una herramienta de enseñanza para el programa de ciencias de la escuela. Los residuos de la cafetería se procesan como parte de la instrucción; El compost se estudia en los suelos agrícolas y laboratorios, se utiliza en los campos educativos y se vende a los agricultores locales.
Una de las mayores victorias del proyecto puede verse en el techo, donde una serie de paneles fotovoltaicos se estudia en las clases de física y química. La instalación fotovoltaica de 100kw fue utilizada como un caso de prueba para el campus entero. Basándose en los resultados, el campus ha desarrollado un sistema de 5 megawatt que proveerá el 125% de la energía requerida por el campus. Esto efectivamente saca al campus “fuera de la red“, lo que lleva a garantizar US$62.000.000 de ahorro en costos de energía durante los próximos 30 años. El sistema de trabajo seguirá ofreciendo oportunidades de enseñanza, con medidores de energía que permiten a los estudiantes realizar un seguimiento de la producción versus el consumo.
En el aprovechamiento de la abundante luz natural, en el enfoque de manejar la tierra de forma sustentable, en el estudio del suelo, en el compostaje y en devolver algo a la comunidad local; el edificio y su emplazamiento, celebran la agricultura de Yuma. El edificio comunitario conecta a los estudiantes y profesores con la superposición de circulaciones y la generación de conexiones visuales entre los espacios (tanto dentro como fuera). La nueva puerta de acceso está flanqueada con servicios estudiantiles, una tienda y avisos en la comunidad local como escenario para conferencias y eventos culturales. Los paneles de las paredes exteriores reflejan la rica textura del desierto, la intensidad del cielo azul, y los estudiantes que pasan.