Sabine Kehm dio un mensaje no muy alentador sobre la situación del siete veces campeón del mundo. “Sólo nos queda tener paciencia y mantener la esperanza”
La familia de Michael Schumacher formó un blindaje mediático sobre el estado de salud del exF1. Sólo algunas declaraciones aisladas logran construir un panorama que no permite ilusiones acerca de cómo el alemán va llevando este difícil momento de su vida.
Esta vez, el mensaje fue proporcionado por la portavoz de la familia, en una exposición que se realizó con motivo del 20º aniversario del primer test que el piloto tuvo como corredor de Ferrari.
«Es el piloto más exitoso de la historia y a veces, en días como éste, es bueno recordarlo. Por supuesto, Michael no está aquí y por supuesto, le echamos de menos. Sabemos lo que ha pasado y no podemos cambiarlo. Debemos aceptarlo y esperar que con todo lo que tenemos, junto con el continuo apoyo y con paciencia, él vuelva a estar un día de vuelta con nosotros. Las carreras eran su vida y a nadie le hubiese gustado estar aquí más que a él» declaró Sabine Kehm, mánager del corredor.
La última persona cercana a la familia que había hecho referencia al estado de salud de Schumacher fue el ex presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, cuyo mensaje tampoco fue muy esperanzador al respecto: «Estoy continuamente informado y las noticias que me llegan no son buenas» había dicho hace unas semanas.
El Kaiser sufrió un accidente el 29 de diciembre de 2013 mientras esquiaba en los Alpes. Está postrado desde aquella fecha y es atendido en su casa por varios especialistas.
