La producción local de billetes de 100 no alcanza

0

A pesar de que las máquinas de Ciccone funcionan al tope de su capacidad productiva, la cantidad de billetes no alcanza a satisfacer la demanda. P
or este motivo, el Gobierno buscaría ayuda en el exterior para imprimir más moneda.

Este año, el Gobierno acudiría a la Casa de Moneda de Brasil y a la de Chile para fabricar papeles de $100.

«La Casa de Moneda de Brasil tiene un rezago de billetes de un contrato anterior que aún no entregó y debe entregar, y está en ese proceso», reconocieron fuentes del BCRA, según publica La Nación.

«Más allá de eso, la Casa de Moneda argentina puede eventualmente, como en años anteriores, renovar los acuerdos que tiene con sus pares de Brasil y Chile, si fuera necesaria alguna impresión complementaria de billetes para atender el normal abastecimiento del pico estacional de demanda que es habitual a fin de año» agregaron.

En diciembre de 2010, antes de que se estatizara la imprenta Ciccone, el Gobierno debió pedirle asistencia a Brasil para la impresión de billetes de $100, ya que no le alcanzaba con la capacidad de la Casa de Moneda para acompañar el ritmo de emisión del Banco Central. Por estos días, aun con las máquinas de Ciccone a pleno, se ve obligado a hacer lo mismo.

Los técnicos estiman que, cada año, deben reemplazarse cerca del 30% de los billetes en circulación simplemente por deterioro. A diciembre de 2014, de acuerdo con datos publicados por el BCRA, había en circulación 4914 millones de unidades, teniendo en cuenta los billetes de 2, 5, 10, 20, 50 y 100 pesos. Sólo si se buscara mantener la misma cantidad de unidades en buen estado, el Gobierno debería fabricar en 2015 unos 1474 millones de billetes nuevos.

Y eso sin contar lo que debe sumarse para acompañar el mayor ritmo de emisión monetaria y el impacto de la inflación, que hace que se necesiten más pesos para pagar las mismas transacciones que hace apenas un año. Entre la Casa de Moneda y Ciccone tendrían capacidad para imprimir a lo largo del año unos 1500 millones de unidades. Con lo cual reemplazar los billetes en mal estado le demanda al Gobierno casi toda la capacidad de impresión instalada localmente. «Vemos billetes cada vez más deteriorados, porque con este nivel de producción no alcanza para todo: reemplazar viejos billetes y encima producir nuevos», explicó al matutino una fuente que conoce los mecanismos del Banco Central.

De ahí que desde 2010 el Banco Central haya optado por emitir casi exclusivamente billetes de la máxima denominación ($100). Esta tendencia, sin embargo, viene acentuándose exponencialmente cada año. En lo que va de 2015, el BCRA incorporó al sistema 519,4 millones de billetes de $100 nuevos (más allá de los que pudo haber emitido para renovar los deteriorados en stock), mientras que sólo incorporó 34,7 millones de 5 pesos, 46,3 millones de 10 pesos, 20,9 millones de 20 y 6 millones de 50 pesos. Esto significa que 82 de casa 100 unidades que se crearon son de 100 pesos.

El ritmo de impresión se aceleró en julio pasado (se volcaron al circuito 300 millones de $100 nuevos en apenas 30 días), y suele crecer fuerte en la segunda mitad del año, sobre todo hacia diciembre, cuando crece estacionalmente la demanda de efectivo de la gente.