Lázaro Báez rompió el silencio desde la cárcel y ya empezaron las especulaciones sobre cómo seguirá su estrategia en la causa de «La ruta del dinero K», con fuertes rumores de que su hijo Leandro, será el próximo «arrepentido».
«No sólo Cristina. Todo el mundo me usó de forro», disparó el empresario K desde el penal federal de Ezeiza, en el que está detenido desde hace cuatro meses. Atrás quedaron los tiempos en los que Báez se ocupaba de la construcción del mausoleo de Néstor Kirchner y acaparaba casi la totalidad de la obra pública en Santa Cruz.
Luego de sus explosivas declaraciones el abogado de sus hijos Luciana, Melina y Leandro Báez, Santiago Viola, dijo en Los Leuco que «puede haber un quiebre o cambio» en la postura del detenido empresario K. Al igual que sus hijos el exhombre fuerte de la obra pública patagónica quiere apartar al juez de la causa, Sebastián Casanello, al que acusó de parcial y de no querer investigar a la expresidenta Cristina Kirchner y otros exfuncionarios. De hecho vincularon al juez con Cristina, lo que fue desmentido por ambos.
Consultado sobre la decisión de Báez de haber dado una entrevista, reproducida por Infobae, analizó: «Él va y viene y sostiene que no hay pruebas en su expediente». «Para mí Lázaro tenía más un aspecto de empleado de Néstor o de Cristina», opinó. Además dijo que uno de sus defendidos, Leandro Báez, podría declarar como «arrepentido» si es que la Cámara Federal porteña resuelve apartar de la causa a Casanello.
