El abogado constitucionalista Daniel Sabsay calculó que, a cinco años de la sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, «más de 80 por ciento» de los medios «está en manos del oficialismo» y acusó a la Casa Rosada de haber auspiciado esa norma en un gesto «espasmódico» y con el único objetivo de «amordazar» al Grupo Clarín.
El académico, titular de la carrera de postgrado de Derecho Constitucional de la UBA, consideró «lamentable y muy preocupante» que el Gobierno, «en contra de lo que proclama», haya intentado cercenar «la libertad de expresión» que es la «madre de las libertades» acudiendo a «medios oficialistas y de amigos» para difundir un «discurso que se repite».
«A cinco años de la aplicación de la Ley tenemos un sistema de medios, donde más del 80 por ciento está en manos del oficialismo», advirtió Sabsay, al término de una semana en la que la Autoridad de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) rechazó el plan de adecuación voluntaria del Grupo Clarín.
En declaraciones a radio Mitre, el experto alertó que «entre medios oficialistas y de amigos» el kirchnerismo difunde «un discurso que se repite, que es aburrido y hace que un medio como el suyo (en alusión a esa emisora) obtenga un ‘share’ desmedido».
Si bien dijo no dudar de las «grandes condiciones» de los periodistas que trabajan en ese medio, Sabsay sostuvo que «no ha habido en la historia de la radiofonía argentina que una sola radio, prácticamente, tenga la mitad de toda la audiencia y a veces más y esto es porque a la gente le aburre escuchar un relato que, se sabe, está absolutamente sesgado».
«Cuando todo es espasmódico y cuando se trata de un órgano como la AFSCA, que no es independiente y que está en manos de gente y, en particular su titular (Martín Sabbatella) que son verdaderos advenedizos de la Presidenta (Cristina Fernández), pasa cualquier cosa como lo que está pasando», resaltó.
El constitucionalista aseguró que la Ley de Medios «es una mordaza» cuyo principal destinatario es el Grupo Clarín. «Objetivamente los límites que se ponen en números de medios y tipos de medios por jurisdicción son totalmente arbitrarios: no tienen ningún motivo que amordazar particularmente al Grupo Clarín. Es una Ley que tiene nombre y apellido», aseveró.
Sabsay se adelantó a las críticas que pudieran hacerle referentes del oficialismo por sus expresiones: «A mí no me importa que me digan que soy un mandadero o un servidor del Grupo Clarín; la gente sabe que no es así y quienes lo dicen se descalifican por sí solos», sentenció.
El especialista cuestionó la forma de proceder del Gobierno en un tema como la «libertad de expresión» definida, dijo, como «la madre de las libertades, tal es su importancia en democracia».
La libertad de expresión, recordó el letrado, «no tiene solo una faceta individual, sino un rol social: la posibilidad de que los demás se informen y que, como ciudadanos, al estar informados, puedan ejercer un control efectivo de quienes los gobiernan».
