La diputada Elisa Carrió anunció hoy que se baja de la disputa nacional del Frente Amplio UNEN y solo se dedicará, dentro de ese espacio, a militar la candidatura de Martín Lousteau a jefe de Gobierno en la Ciudad de Buenos Aires. Además, dejó abierta la posibilidad de ser candidata a presidenta pero representando a otro frente.
«Me retiro de UNEN nacional y peleo por la Capital con Lousteau-Sanchez. No voy por la Nación», afirmó Carrió en diálogo con el programa Guetap de radio Vorterix, un día después de que Fernando «Pino» Solanas dijera que si no acata las decisiones del frente debía abandonarlo. «Están todos contentos. Ellos liberados de mi y yo liberada de ellos», ironizó.
Según la diputada, tomó la decisión luego del documento emitido por el radicalismo el lunes, en el que cerró la puerta a alianzas por fuera del FAU. «La decisión de la UCR de no hacer alianzas es la mejor manera que el peronismo gane la elecciones», advirtió Carrió, y agregó: «El electorado se divide en tercios y si la oposición no se une se le garantiza la impunidad al kirchnerismo. Está bien que la UCR haga lo que le parece, que vayan hasta donde les va. Pero yo no me suicido».
Además, denunció que «hay gente de UNEN que tiene acuerdos con Scioli, gente de Ricardo Alfonsín, que llevaron a Pepe Scioli de candidato» y, en ese sentido, afirmó: «Creo en la República pero nunca fui funcional al kirchnerismo. No puedo ser funcional al triunfo de Scioli».
«Prefiero seguir como amigos y que la UCR haga su experiencia. Y yo sacarme esa mochila», sostuvo, y lamentó: «Yo vi otro radicalismo. Vi otra calidad de personas. Vi a Illia, a Alfonsín esforzarse, lo sufrí. Vi la idea triunfar». «Cuando uno ve esta dirigencia de la UCR le da pena», sentenció.
