A horas de la ceremonia de canonización del Cura Brochero, un gran grupo de argentinos se concentró en la Plaza San Pedro para vivir de cerca el histórico momento.
En su mayoría cordobeses, los cristianos argentinos se concentran en la plaza del Vaticano a la espera de la ceremonia que encabezará el Papa Francisco este domingo por la mañana.
Durante la misma, se oficializará la canonización del cura José Gabriel del Rosario Brochero. Es el momento más esperado por miles de fieles que viajaron a Roma.
Este sábado, Monseñor Olivera, que presidió una misa en la iglesia Santa María Addolorata, conocida en la ciudad como “la iglesia argentina”, afirmó que “Vivimos días de gracia. Esta canonización es la certeza de que Dios escucha la oración de su pueblo”.
“La predicación de Brochero fue su propia vida. Y, como lo define el Papa Francisco, fue un cura ‘que supo ponerse la patria al hombro’” afirmó el obispo, y agregó: “Los forenses señalaron que en los huesos de Brochero, en las rodillas, había marcas. ‘Este hombre se arrodillaba mucho’, me dijeron. Ese era Brochero, un cura que se arrodillaba mucho.”
