Los Patriots vencieron ajustadamente a Seattle para coronarse campeón de la temporada 2014-2015 de la NFL. Consiguieron el trofeo Lombardi luego de ir perdiendo por 10 puntos y aguantando en la última yarda a falta de sólo 20 segundos.
Los fanáticos de la NFL tuvieron su noche soñada. La edición XLIX (49) del Súper Tazón tuvo de todo. Un partido muy parejo, que pudo ser de cualquiera de las dos franquicias que llegaron, de manera meritoria, a esta final.
En la primera mitad, los Patriots de New England controlaron más el balón y lograron más primeros downs que su rival, que apenas podía pasar la pelota por el aire. Tras un parcial de 0-0 en el primer cuarto, los de Brady (foto de cabecera) se pusieron 14-7 sobre el final del segundo periodo. Pero Russel Wilson (abajo) logró encontrar al novato Chris Matthews en la zona de anotación para irse al descanso 14-14.
Luego de un colorido espectáculo de medio tiempo llevado a cabo por Katy Perry, Seattle metió un parcial de 10-0 en el tercer cuarto y puso el partido 24-14, con sólo 15 minutos por jugar.
Las estadísticas marcaban que nunca en la historia un equipo pudo remontar más de 10 puntos en la segunda mitad de un Superbowl. Pero poco le importó eso a Tom Brady, mariscal de los Patriots, para ponerse el equipo al hombro y salir a buscar la victoria.
Primero, a 7:55 del final, Brady cedió el balón para Amendola, quién lo esperaba en la zona de anotación para acercarse a 3 en el marcador. Luego, con sólo 2:02 por jugar, Tom Brady logró el record histórico de pases de touchdown en superbowls, tras encontrar a Julián Edelman libre y ponerse por delante en el marcador.
Hasta ese momento, el 28-24 no era seguro, aunque significaba que sólo una jugada de 7 puntos le permitiría a Seattle ganar el partido. Es así como Russel Wilson sacó de la galera un pase magistral para Jermaine Kearse, que de manera milagrosa logró recibirlo. De esta manera, el 1er y gol dejaba con muchas chances a los Seahawks de dar vuelta la historia otra vez. Sin embargo, en el 2do y gol, a sólo una yarda de la zona vulnerable, Wilson lanzó un pase de touchdown interceptado de manera heroica por el defensor Malcolm Butler, que significó el final de todo para Seattle y un nuevo Súper Tazón para New England.
De esta manera, los Patriots conquistan su cuarto anillo de campeones, sacándole el título de las manos a los últimos campeones, los Seahawks. El premio al mejor jugador del partido se lo lleva Tom Brady, que con sus cuatro pases de Touchdown y sus 328 yardas ganadas entra en la historia como uno de los mejores mariscales de la NFL.
