En el “Gigante de Arroyito”, los de Miguel Ángel Russo la pasaban mal por la victoria parcial de los del Viaducto con un tanto de Zelaya. Sin embrago, el “Canalla” tuvo un complemento arrollador y cambió la historia con los tantos de Musto y el doblete de Valencia para conseguir la victoria por 3-1.
Parecía que inexorablemente Rosario Central se encaminaba a otra derrota que hacia más profunda la herida tras la eliminación de la Copa Sudamericana a manos de Boca. Sin embargo, los de Miguel Ángel Russo revirtieron la imagen en el complemento y se terminaron quedando con una victoria necesaria y justa por el nivel mostrado. Arsenal, que venía de ser goleado ante Quilmes, generó muy poco y tendrá que trabajar bastante el entrenador Martín Palermo para revertir este pálido presente.
Arsenal le hizo pagar caro al local la falta de ímpetu en un primer tiempo de lo más flojo de los rosarinos en lo que va del semestre. Sin ser brillantes, les alcanzó a los de Martín Palermo aprovechar un grosero error defensivo para irse al descanso con los tres puntos bajo el brazo: Zelaya, asiducho en las redes ajenas, ajustició a Mauricio Caranta, que le puso el pecho al primer remate pero no pudo con el rebote que quedó también en los pies del nueve.
Si bien había mostrado signos de recuperación en el epilogo de la primera etapa (una volea de Valencia que visitó el cielo y un tiro libre de Pablo Becker que pegó en el travesaño), los de Miguel Ángel Russo exhibieron un fútbol de alto vuelo en el complemento y lograron batir la férrea resistencia de los del Viaducto, que se confirmaron demasiado rápido con la humilde ventaja. Damian Musto niveló el marcador en una pelota parada y el colombiano Valencia de media vuelta, tras una apilada de Becker, dio vuelta la historia.
Con la ventaja y el trámite del partido a su merced, Rosario Central lo liquidó sobre el final con una definición exquisita de Valencia, que sin tapujos, definió por encima de Esteban Andrada para sellar el 3-1 final y hacer delirar a todo el pueblo “Canalla”, que al finalizar el partido devolvió con aplausos efervescentes la gran actuación de su equipo.
