Al menos 56 muertos y 13 desaparecidos causó hoy el naufragio de un pesquero ruso en el Mar de Ochotsk frente a la península de Kamchatka, en el extremo oeste de Rusia. Se trata de tragedia marítima más grave en la historia reciente de ese país.
El pesquero Dalniy Vostok se hundió en un lapso de 15 minutos en las gélidas aguas del Okhotsk.
Entre las víctimas se encuentra el capitán, quien no pudo siquiera lanzar la señal de socorro, mientras otros 63 marinos lograron salvarse, aunque una decena de ellos se encuentran en graves condiciones de hipotermia, un efecto casi letal de las aguas congeladas. La mayoría de la tripulación era de Rusia (78) y de Birmania (42), los otros, de la república de Vanuatu (5), de Ucrania (4) y de Letonia (3). El operativo de rescate ha sido gigante, al involucrar 1.397 hombres, 26 barcos, aviones y helicópteros. Entre las diez hipótesis del accidente, la colisión con un bloque de hielo flotante y el exceso de carga o el desequilibrio de la nave por haber izado a bordo de una red de arrastre de 80 toneladas sin lastre adecuado y tanque de gasolina casi vacío. El Dalniy Vostok era un viejo gigante de los mares, un pesquero-congelador de 26 años con 5700 toneladas y una longitud de 104 metros.
Había partido el pasado 3 de enero desde el puerto de Vladivostok y ayer a la mañana seguía navegando cuando, de manera imprevista, alrededor de las 9 locales y a 250 kilómetros al sur de la ciudad de Magadan, comenzó a inclinarse y a hundirse rápidamente mientras era tirada a bordo de una enorme red de arrastre llena de arenques y merluzas.
Muchos usaron los botes salvavidas, pero otros terminaron en las aguas, con temperaturas cercanas a cero, en las que es posible sobrevivir hasta los 20 minutos. Las tareas de rescate se reanudarán después de la noche, en un área de 8.500 kilómetros cuadrados, pero hay pocas esperanzas de encontrar con vida 13 desaparecidos.
La protección civil sugirió la hipótesis de que el buque pudo haber chocado con un bloque de hielo y que grieta inundó la sala de máquinas.
Pero el gobernador de la isla de Sakhalin, Oleg Kozhemiako, deslizó la tesis de una eventual violación de reglas de seguridad por una sobrecarga que habría desequilibrado la nave.
El barco, de un valor de 30 millones de dólares, estaba registrado a nombre de la sociedad rusa Maghellan, con sede en el puerto de Nevesk, en la región de Sakhalin. Según Piotr Osishanki, presidente de la asociación de capitales del mar de extremo oriente,dijo que la última vez que el Dalniy Vostok había llegado a Rusia, en enero, tenía menos de 70 marinos: probablemente los otros, embarcados luego, trabajaban ilegalmente. El presidente ruso, Vladimir Putin, envió sus condolencias y ordenó que se tomen todas las medidas necesarias para asistir a los sobrevivientes y a los parientes de las víctimas.
La última tragedia naval rusa se remonta a julio de 2011, cuando un antiguo barco turístico se hundió en el río Volga y causó la muerte de 122 personas.
