Las casas de nuestros ancestros eran construidas sobre terrenos planos con formas como esta ¤±, o esta ¤§. Estos sitios eran como pequeños espacios confidenciales para cada familia basados en la filosofía de Confucio, geomancia entre la relación ética de marido y mujer. Las ciudades modernas, por otro lado, reclaman terrenos al mar, destruyendo la naturaleza preservada durante siglos y produciendo suelos artificiales con el objetivo de hacer mas grande la tierra fértil donde se reproduzca la vida humana.
Series de casas desarticuladas con el mismo diseño estandarizado y con sus nuevas respectivas direcciones otorgadas, se alinean al borde de la calle en un nuevo complejo habitacional en Suwan-dong, de la ciudad Gwangju que es parte de la Provincia de Jeollanam, sitio donde este proyecto está ubicado. El terreno abierto que descansa al borde de la calle representaba un reto para el propietario, que buscaba construir un hogar cómodo y privado, dentro de un vecindario donde la petición de mantener al mínimo las bardas parecía una solicitud desconsiderada.
El proceso de insertar ‘una historia secreta y privada del individuo dentro de la casa’ comenzó por llenar los espacios comunes al interior de jardines con alta densidad. En vez de colocar un jardín central compartido, rodeado de un marco espacial, esta casa ofrece a los miembros de la familia varios microcosmos ajardinados al interior. Células compuestas individualmente derivan en varias experiencias visuales al exterior, mientras al interior, el patrón que siguen los espacios propone categorías que responden al comportamiento y personalidad de los usuarios.
El caracter de cada superficie en la residencia ofrece un recorrido espacial continuo, cubierto de historias y comportamientos generados por el mismo espíritu del recubrimiento, mientras que la relación fragmentada y furtiva entre la casa y el centro de la ciudad (Perspectiva Íntima) operará como un marco flexible para mantener conciencia del paso generacional en la ciudad. La Arquitectura debería funcionar como un recinto receptor que pueda asegurar la individualidad de los usuarios, no ser un campo de concentración donde los usuarios se aíslen de la vida comunitaria.
El espacio confidencial interior continuará transformándose y creando patrones dramáticos con cada pequeño mundo condensado que se le presente.