Los hermanos Mac Allister de Argentina, Alexis y Kevin, lograron una hazaña familiar inusual el domingo al levantar trofeos del campeonato en la misma tarde en diferentes países, aunque ninguno de ellos participó en el último juego de la temporada de sus equipos.
Alexis Mac Allister tuvo sus manos en el trofeo de la Premier League en Anfield después de que Liverpool aseguró el título el mes pasado, mientras que su hermano mayor Kevin sufrió una tarde nerviosa en Bélgica cuando su club Union St.-Gilloise terminó una espera de 90 años para el campeonato.
Mientras que Kevin fue suspendido por su último encuentro de la temporada en casa con Gent, donde una victoria por 3-1 fue suficiente para verlos ganar un primer título desde 1935, Alexis se quedó fuera el último partido de Liverpool en casa con Crystal Palace para evitar lesiones.
“Creo que jugó durante la última parte de la temporada con la mentalidad argentina que tiene”, dijo el gerente de Liverpool, Arne Slot.
“Nunca te rindas, sin importar lo que sienta, pero no es inteligente jugar a un jugador que tenga, no una gran lesión, sino algo con lo que arriesgarte”.
El mediocampista de 26 años, que estaba en el lado de Argentina que ganó la Copa Mundial en Qatar, se mudó a Liverpool desde Brighton & Hove Albion hace dos temporadas y comenzó 30 juegos en su campaña ganadora del título.
Kevin Mac Allister, un año mayor, juega más atrás, pero exhibe las mismas características resistentes que su hermano.
Het Nieuwsblad describió al defensor el lunes como “un soldado que nunca se rinde”.
“Tocó en las últimas semanas con una máscara, un hombro vendado y una rodilla grabada, pero se negó a rendirse debido a una lesión”.
Kevin dijo que había sido difícil no estar en el campo ayudando a sus compañeros de equipo.
“Fue difícil ver el juego desde el costo. Estaba tranquilo, a pesar de que la primera mitad no fue la mejor”, dijo a los periodistas.
“Siempre trato de mantener al grupo tranquilo. A veces las emociones se ponen demasiado altas y eso no es bueno. Me alegro de que nos hayamos mantenido tranquilos y terminados”.
Un tercer hermano, Francis, de 29 años, actualmente juega en la máxima categoría de Argentina con Insituto. Los tres hermanos comenzaron en Argentinos Juniors, apareciendo juntos por primera vez en 2017.
Su padre Carlos ganó tres gorras para Argentina y jugó en Boca Juniors, donde ganó un campeonato de liga en 1992.