No pasa un día en que Dick Fuld, otrora uno de los hombres más poderosos de Wall Street, no piense en la quiebra de Lehman Brothers, el banco de inversión que dirigió hasta el 15 de septiembre de 2008, cuando su quiebra desató la peor parte de la crisis financiera… Y de la crisis personal del ejecutivo.
Aunque ha guardado silencio por prácticamente todos estos años, el jueves pasado Fuld decidió que «era hora de levantar la cabeza», cosa que hizo en un foro empresarial.
Habló sobre lo mucho que lo afectó la crisis, en todos los planos, y sobre cómo ha vivido, prácticamente sin trabajo durante estos siete años, solo a cargo de matrix Advisors, una pequeña consultora que fundó en 2009: «Mi lema es: Eso fue entonces, esto es ahora».
Fuld, que construyó y perdió una fortuna de US$ 1.000 millones en Wall Street, dijo que la acumulación de la burbuja inmobiliaria comenzó con un empuje muy agresivo del gobierno de aumentar la propiedad de vivienda, que terminó inflando los precios de los activos: «Ellos querían cumplir el sueño americano de tener viviendas, pero eso infló los precios», dijo.
