«No hay duda de que el crimen fue meticulosamente planificado, así como el lugar elegido para el asesinato (el Gran Puente de Piedra, al lado de Kremlin)”, indicó el Comité de Investigación, encargado de las pesquisas. Esto fue confirmado hoy por los investigadores que analizan el caso del asesinato del líder opositor ruso Boris Nemtsov, ocurrido durante la noche del viernes.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, había admitido ayer que el crimen reúne los rasgos de un asesinato por encargo y que tiene el carácter de una «provocación». Putin ordenó a la policía, al Comité de Investigación y al Servicio de Seguridad la creación de un grupo de investigación para esclarecer el asesinato. Además, estará a cargo de supervisar el operativo.
El viernes por la noche fue hallado cerca del Kremlin el cuerpo de Boris Nemtsov, uno de los mayores críticos del gobierno. Este hecho se suma al del ex viceprimer ministro fue asesinado de cuatro balazos por la espalda cuando paseaba por la zona con una mujer. El presidente ruso también expresó su más sentido pésame a la familia y allegados del político.
El gobierno es cuestionado dentro y fuera del país por la situación de los derechos humanos y de las libertades elementales, además de la persecución a los opositores. En varias oportunidades, se cuestionó además la política para con la comunidad homosexual, a partir de que la gestión de Putin promulgara una ley que prohíbe todo tipo de «manifestación de homosexualidad».
