La organización extremista asesinó a tres jugadores de fútbol y a su entrenador por practicar este deporte que, según sus preceptos, van en contra del Islam.
Otra ejecución por parte de ISIS shockeó a todo el mundo. Esta vez, fueron cinco personas las decapitadas por el grupo terrorista, cuatro de ellas pertenecientes a un muy reconocido equipo de fútbol sirio.
El Al Shabab perdió de esta manera a los futbolistas Osama Abu Kuwait, Nihad al Hussein, Ihssan al Shawakh y el técnico Ahmed Al Shawakh, asesinados por el simple hecho de practicar el deporte.
Las cinco personas fueron decapitadas frente a decenas de personas, entre las que se encontraban mujeres y niños.
El año pasado, 13 adolescentes fueron masacrados por Estado Islámico en la ciudad iraquí de Mosul mientras miraban el partido de la Copa de Asia entre Irak y Jordania.
En Raqqa, el fútbol es una práctica prohibida para los mayores de quince años. Por eso, los adultos que son sorprendidos jugando o mirando un partido son inmediatamente ejecutados por distraerse de sus deberes religiosos.