Multitudinaria marcha de la otra Cataluña que quiere seguir en España

La Cataluña contraria a la independencia ha colapsado el centro de Barcelona en una manifestación multitudinaria.

Más de un millón de personas, según Societat Civil Catalana organizadora del acto, y unas 350.000 según la Guardia Urbana, han salido a la calle para pedir que Cataluña siga dentro de España.Entre gritos de «Puigdemont a prisión»,»Yo soy español» o «Viva España, viva Cataluña y viva la Guardia Civil», la manifestación ha discurrido por el centro de la ciudad, desde la plaza Urquinaona y sus inmediaciones, hasta la estación de Francia, entre banderas españolas, catalanas y europeas bajo el lema ¡Basta! Recuperemos la sensatez.

Los partidos políticos PP, Cs y PSC han enviado a sus máximos representantes a la concentración. El Partido Popular ha estado representado por Dolors Montserrat, Rafael Hernando, Javier Arenas, Pablo Casado, Enric Millo, Andrea Levy, Xavier García Albiol o Cristina Cifuentes; de Ciudadanos estuvieron Albert Rivera, Inés Arrimadas, José Manuel Villegas o Begoña Villacís, y del PSC siguieron la marcha Salvador Illa, Josep Borrell o Celestino Corbacho.

La cabecera ha tardado en llegar al final del trayecto por el gentío que se ha manifestado y una vez allí han tomado la palabra el premio nobel de literatura Mario Vargas Llosa y el ex presidente del Parlamento Europeu Josep Borrell. Ambos han hecho un llamamiento a acabar con el nacionalismo disgregador y han pedido a la población catalana que recupere el seny (la sensatez).

Vargas Llosa ha asegurado que la democracia española «está aquí para quedarse, y ninguna conjura independentista la destruirá». En su discurso ha advertido de que el nacionalismo «ha llenado la historia de Europa, del mundo y de España de guerra, sangre y cadáveres».

Por su parte, el ex presidente del Parlamento Europeo Josep Borrell ha criticado a las empresas que anuncian su cambio de domicilio social fuera de Cataluña ahora que temen una declaración de independencia: «¿No lo podíais haber dicho antes?». «Todo lo que dijisteis en privado ¿por qué no lo decíais en público?», les ha preguntado durante su discurso. La concentración ha finalizado con la lectura de un manifiesto, a cargo del vicepresidente de SCC, Álex Ramos, y del ex fiscal superior de Justicia de Cataluña Carlos Jiménez Villarejo, en el que se pide acabar con la «marginación» de los catalanes no nacionalistas, así como con la «confrontación», la «confusión» y el «dolor» que, asegura, vive la población de Cataluña con motivo del 1-O.»Ningún actor político debe obviar que los catalanes no nacionalistas formamos parte del paisaje y que somos también sociedad catalana. Se acabó la marginación, tenemos derecho a ser escuchados y a ser tenidos en cuenta», reza el manifiesto.

La manifestación congregó a miles de personas desde las 11.00 horas de la mañana y no ha finalizado hasta casi las 15.00 horas. Durante todo el recorrido no se ha registrado ningún incidente. La acampada que algunas entidades habían anunciado que se haría a las puertas del Parlamento catalán, finalmente, se ha desconvocado.