Con la nueva señalética vas a poder informarte mejor sobre las alternativas de salidas, accesibilidad, combinaciones y puntos cercanos de la ciudad. Además, para facilitarte la lectura desde los coches, se están instalando nomencladores bajos, a 1,20 metros de altura.
Con este cambio también buscamos reducir la contaminación visual, evitando la sobrecarga de señales y ofreciendo un espacio más simple y legible.
Por otra parte, facilitamos el mantenimiento, ya que la antigua señalética era difícil de manipular y vulnerable al vandalismo y a la corrosión. En cambio, la nueva cartelería es más liviana y posee una protección gráfica de laca para garantizar su conservación.
Seguimos trabajando para ofrecerte un servicio más cómodo. Por eso, ya renovamos la señalética en diferentes puntos de las líneas B, D y E y avanzamos con el recambio en la Línea C, siempre respetando las estaciones patrimoniales.
