El secretario de Seguridad, Sergio Berni, instó a la creación de un comité de crisis para evitar el desborde de las fuerzas. La medida nuclea a funcionarios de las provincias, fiscales y jefes policiales.
El Gobierno informó que ya avanzó en la construcción de un plan “antiacuartelamientos” para evitar posibles desmanes en diciembre y ofreció ayuda a los gobernadores ante posibles actos de rebeldía por parte de las fuerzas de seguridad. Por ello, se reactivó el trabajo del comité de crisis que sumó a una comisión especial de fiscales para casos de sedición.
Según informó el diario Infobae, los gobernadores temen desde hace tiempo un efecto «contagio» en las provincias ante posibles desmanes a fin de año, por lo que «vienen reclamándole al Gobierno apoyo en materia presupuestaria y logística, y acciones coordinadas con la Justicia».
La medida ya fue tratada hace diez días en un encuentro reservado entre el secretario de Seguridad, Sergio Berni, 22 ministros de seguridad provinciales y la cúpula de la Federal, Gendarmería, Prefectura y la PSA en donde se diagramó un mapa de contención y aseguró que «en los lugares donde haya levantamientos policiales habrá asistencia automática».
A tales fines, el Gobierno anticipó a los gobernadores que ya se encuentra en tratamiento el decreto 1765/2014 que implica el desembolso de $ 1.000 millones, a través de Nación Fideicomisos, en equipamiento para las policías locales, unos mil autos y unas 500 camionetas.
Las zonas que presentan mayor peligro de desborde de fuerzas de seguridad son: el Gran Mendoza y el Gran Tucumán (las periferias de las capitales), Bariloche y la provincia de Buenos Aires, sobre todo en los municipios de Escobar y San Martín.