Los Warriors derrotaron 103-90 a Boston Celtics de visitante y cerraron la serie 4-2 en la final de la NBA. Stephen Curry brilló con 34 puntos y fue el jugador más valioso de su equipo que alcanzó el séptimo título en su historia, el cuarto en ocho años
Así como Chicago Bulls de Michael Jordan en la década del 90 o Los Ángeles Lakers de Kobe Bryant en los 2000 dominaron la escena, Golden State Warriors está marcando el gran poderío de los últimos años, incluso llegando a los mismos títulos que el mismísimo LeBron James, ganando la final sin dudas para ser una de las franquicias con más títulos en la NBA.
El elenco de Steve Kerr se impuso en el Estadio TD Garden por 103-90 con parciales de 27-22, 27-17, 22-27 y 27-24 cerrando la serie en el sexto juego por 4-2 gracias a la gran figura del base de 34 años Stephen Curry que fue el máximo anotador con 34 puntos (6 de 11 en triples) con 7 rebotes y 7 asistencias, además de los 18 de Andrew Wiggins y las 12 unidades tanto de Klay Thompson y Draymond Green.
El elenco de San Francisco se quedó con el séptimo título en su historia (1947 y 1956 con el nombre de Philadelphia Warriors, 1975, 2015, 2017 y 2018) el cuarto anillo en los últimos ocho años, ubicándose tercero superando por uno a Chicago Bulls y evitando que Boston Celtics sea el elenco más ganador con 18 campeonatos (sigue igualado con Lakers).
Además el entrenador Kerr logró su cuarto anillo en el banco, a uno de Pat Riley y Gregg Popovich, mientras que el base que utiliza la camiseta 30, Curry se coronó por primera vez como el jugador más valioso en una final, siendo con 34 años y 63 días el tercer hombre más longevo detrás de Wilt Chamberlain (35) y John Havlicek (34 años y 34 días).
También Andre Iguodala con pocos minutos en la serie cosechó su cuarto título y tanto Curry, Thompson como Green alcanzaron como trio más ganador a Tim Duncan, Emanuel Ginóbili y Tony Parker de San Antonio Spurs.
