Mauricio Macri se presentó ante los empresarios que fueron a escucharlo al Council of Americas.
Acusó de «populismo derrochador» al kirchnerismo, y al mismo tiempo buscó desmarcarse de la etiqueta de «neoliberarl» y «abanderado del ajuste» que le quieren pegar los kirchneristas y, también, el Frente Renovador que lidera Sergio Massa.
El Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, hizo hincapié en mejorar la calidad de la educación, en la innovación y en desatar las fuerzas productivas de la Argentina. Y todo ello bajo el paraguas de «un Estado fuerte e inteligente, que articule entre todos los sectores».
Insistió en el desarrollo federal del país, de las oportunidades y capacidades de cada región y en apostar al «desafío de la innovación y el conocimiento».
Promediando su exposición, reconoció que se está terminando el viento de cola y que el futuro se presenta bastante complicado. Fue allí cuando advirtió: «No hay que ser pesimistas, ni tampoco debemos resignarnos a que estamos condenados a elegir entre un populismo que derrocha y un gobierno neoliberal que ajusta».
Sobre el cierre, acusó directamente al kirchnerismo encarnado en el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. «El peor legado de este gobierno es el achatameinto de nuestras discusiones. Hablamos y discutimos cosas que ya no se hablan en ninguna parte del mundo».
Al final, exhortó a los empresarios: «La sociedad espera que líderes como ustedes salgan a la cancha a mostrar un camino de progreso y crecimiento. Nadie espera que le regale nada, sino la oportunidad de que les dejen mostrar de que son capaces los argentinos cuando trabajamos en serio».
