132.000 venezolanos decidieron traspasar la frontera con Colombia para abastecerse de productos que escasean en su país debido a la crisis económica. Aquí algunos de los testimonios.
Harina, aceite, arroz, champú, toallas sanitarias y hasta papel higiénico son algunos de los productos que miles de venezolanos fueron a buscar a la ciudad de Cúcuta, luego de que el gobierno de Maduro abra las fronteras con Colombia, tras más de diez meses de mantenerlas cerradas por supuestas “razones de seguridad”.
La crisis económica en el país bolivariano repercutió en todo el sistema comercial. Los supermercados no dan abasto, con colas interminables de ciudadanos que no logran acceder a los bienes más básicos de la canasta familiar.
Y Colombia, lejos de rechazar el éxodo de compras, recibió a sus vecinos, comprendiendo la situación desesperante que están atravesando. Es por eso que en muchos videos subidos a las redes sociales se ve a un pueblo agradecido.
Un hombre abraza a un militar colombiano y rompe en llanto cuando reflexiona sobre la dura crisis que vive su país, donde no puede siquiera comprar un paquete de arroz.
Familias con bolsones atraviesan la frontera luego de gastarse sus ahorros en comida y artículos de limpieza y aseo personal.
Madres que van a buscar medicamentos a todas las droguerías y farmacias de Cúcuta, debido a que los nombres de los remedios en ambos países difieren y deben buscar los equivalentes.
Esas son sólo algunas de las historias de personas agradecidas con un pueblo hermano que no los negó.
