Casa habitación de 800 m2 en una sola planta inserta en un terreno plano de 2000 m2 sin vegetación relevante en un barrio suburbano en el norte de Merida Yucatán para una familia joven de 5 miembros.
El núcleo del proyecto concentra las áreas sociales, organizadas alrededor de una amplia terraza que articula la sala, el comedor, el cuarto de juegos, la cocina-desayunador y un estudio y la piscina.
El resto del programa se compone a partir de un esquema en “L” que responde a las condiciones de un terreno rectangular cuyo eje largo corre en sentido norte-sur, con las orientaciones favorables para captar viento hacia el oriente y el norte y protegerse del sol del poniente y el sur.
De esta forma las 3 recamaras principales, se abren tanto a patios internos ajardinados, como al gran jardín de 1000 m2.
El catálogo de materiales de acabados es limitado: mármol suave nacional en todos los pisos interiores, duelas de madera semi dura en pisos para categorizar la importancia de los mismos, así como deckings y puertas.
Muros de concreto armado colados con tierra roja “cancab” y con láminas onduladas de asbesto como molde se plantean como elementos de acento de luz y sombra, así como contrapunto con la piel de estuco de cemento integrado con color, material protagónico de acabado en todas las fachadas.
La técnica y proporciones de materiales de los muros de concreto con tierra natural, son otra aportación del estudio reyesrios+larrain arquitectos a la arquitectura contemporánea de Yucatán.
