Una familia activa, que ama la jardinería y jugar al aire libre, encontró una parcela en un paisaje rural situado a 20 minutos del centro de la ciudad en vehículo. La zona está en un sector relativamente nuevo de viviendas en un área suburbana en desarrollo, y su entorno incluye extensos campos y establos. Este sitio pertenece a un área de planificación regulada, lo que significa que una vista sin obstáculos del paisaje está garantizada, a menos que se cambien las normas de planificación de la ciudad.
Al estudiar el contexto, se descartó crear un diseño elaborado y complejo que sería más adecuado para un entorno urbano moderno de alta densidad. En su lugar, la solución más convincente en la forma de incorporar eficazmente el paisaje, fue la de proporcionar un diseño abierto que aprovechara los elementos circundantes. En el diseño, un gran techo enmarca el paisaje y da refugio a la familia bajo él. Un living de planta libre se colocó en la parte sur de la planta de 8.19 m2; En contraste, los espacios privados como dormitorios, baños, y almacenamiento se localizaron al norte. Esta planificación genera capas graduales y continuas de privacidad, conectando desde la granja, el jardín, la terraza, y el living a la habitación de los niños.
Una cubierta a dos aguas en 45 grados, fue elegida para crear un gran espacio interior y una estructura eficiente. El techo descansa sobre un marco de madera simple 105x105mm y está hecho de vigas 2×12 espaciadas 455 mm de distancia, y utiliza contrachapado estructural sismo-resistente. El hastial totalmente acristalado permite vistas dinámicas al paisaje rural. El techo y su direccionalidad estructural hacen hincapié en la perspectiva de norte a sur.
Un espacio como chimenea se extiende fuera de la gran cubierta, dando forma a una torre de ventilación llamada «Kaze no Ma» (espacio de viento). Esto fue inspirado en un pequeño pueblo que vi en África. Como el aire caliente sube y se escapa a través de la ventana en altura, se genera un tiraje de aire fresco hacia el interior, a través de las ventanas de la planta baja. Una pintura de color negro en el interior de la chimenea promueve este ciclo de ventilación.
Los conductores que viajan a lo largo de la carretera y pasan frente a la casa, a menudo la miran con fascinación. Los vecinos pasan a saludar a la familia y un agricultor local los visita con regularidad para compartir sus verduras frescas cosechadas. Esta gran «casa techo» está contribuyendo poco a poco a la construcción de nuevas relaciones entre las personas en el área. Confiamos que seguirá proporcionando un espacio para vivir muchos buenos momentos en el futuro.
