El presidente de la nación finalmente no estuvo en Villa La Angostura, como habían señalado varios medios, sino que se alojó en la propiedad del multimillonario británico. Se trata de la casa que ocupa parte de la salida del Lago Escondido y es considerada “privada”, por lo cual los turistas y lugareños no pueden acceder a él.
Tras la visita de Obama, aprovechada también con Macri para pasar el fin de semana largo en el Sur, trascendió la noticia de que el presidente se hospedaría en cabañas de Cumelen, en Villa La Angostura. Sin embargo, el mandatario y su familia, al aterrizar el jueves en el aeropuerto de San Carlos de Bariloche, fueron recibidos con un helicóptero perteneciente al polémico británico Joe Lewis, dueño de la estancia Lago Escondido.
La familia presidencial no fue dirigida a Villa La Angostura, sino que, contrariamente a lo que habían difundido fuentes oficiales, se alojó en la propiedad del magnate. El único momento en el que Macri abandonó la estancia fue cuando despidió a Obama en el Hotel Llao-Llao.
Al estar ubicada en la orilla del lago homónimo, la estancia Lago Escondido tiene un perímetro que toma parte de la costa, por lo que los turistas y vecinos del lugar tienen prohibido el acceso. La estancia fue construida en los años 90’, y es eje de disputa entre los lugareños y Lewis.
Hay silencio desde el ejecutivo, que decidió aún no dar explicaciones. Es similar a lo que sucedió en 2013 durante el gobierno de Cristina Kirchner. En ese entonces, la presidente utilizó un helicóptero de Lewis, pero había sido un alquiler debido a que precisaban una aeronave de ese porte para llegar a destino. La polémica había surgido también por el hecho de que los funcionarios no pueden utilizar aeronaves prestadas para realizar vuelos.
