La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, prometió hoy que se cuidarán los puestos de trabajo de los operarios de Rasic Hermanos, que vende los pollos «Cresta Roja», pero condenó el corte en el acceso al aeropuerto internacional de Ezeiza e intimó a los dueños de la compañía.
«Desde el gobierno nacional y la Provincia, vamos a trabajar en el cuidado de los puestos de trabajo», afirmó Vidal y le reclamó a los dueños de Rasic Hermanos que cumplan con el fallo judicial que «ordenó» que «hagan frente» a la situación que atraviesa la compañía o «busquen» a otras empresas con propietarios «interesados» en reactivarla.
Durante una conferencia de prensa en Casa Rosada, Vidal también envió un mensaje a los operarios que protestan en la autopista Riccheri: «El conflicto, para nosotros, no debe ser expresado cortando el acceso a Ezeiza. Hay un marco de diálogo con los representantes gremiales y no es necesario sostener este corte. El corte no es la manera de resolver el conflicto».
«La Nación viene aportando una parte importante del salario y vamos a trabajar para que esa empresa pueda tener continuidad», prometió Vidal al referirse a la compañía intervenida por la administración provincial saliente.
No obstante, alertó que la Nación y la Provincia van a ser «rigurosos» con los «dueños de la empresa», sobre quienes recordó que la Justicia les «ordenó» que «hagan frente» a la situación o «busquen» otras compañías con propietarios «interesados» en reactivar a Rasic Hermanos.
